Desayuno y merienda saludables: ¿qué comer antes de hacer deporte?


Averiguamos los alimentos que hay que consumir para tener la energía que necesitamos
JUEVES 21 DE SEPTIEMBRE DE 2017 • 16:29
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Foto: OHLALÁ! / Brooke Lark/Unsplash
¿Tenemos hábitos saludables? Muchas veces, metidas en la vorágine diaria no prestamos atención a los alimentos que consumimos y terminamos comiendo mal porque no le damos al cuerpo los nutrientes que necesita según las actividades del día. Un momento clave es antes de hacer deporte y otro, después. ¿Sabés qué es lo que recomiendan los especialistas en nutrición? El dato principal: antes de hacer deporte es importante consumir carbohidratos y, después, proteínas y carbohidratos.
El músculo tiene que estar a full de glucógeno -que es la forma en la que el cuerpo almacena carbohidratos en el músculo- para tener energía y rendir al máximo.
Si entrenás a la mañana, podés partir el desayuno en dos: tostadas con una infusión o, si te levantás con el tiempo muy justo, una banana. Tené en cuenta que está bueno que la cena también sea rica en carbos (un hábito que tienen los deportistas de alto rendimiento) e incluí arroz yamaní, fideos integrales, lentejas o lo que más te cope.
Después de entrenar, se vienen los carbohidratos y las proteínas que son híper necesarios para la recuperación. Cuando terminás con tu rutina sporty, el músculo queda como "abierto" o, como en realidad se le llama, es el momento de la ventana anabólica: el músculo está listo para recibir de manera más fácil las proteínas y así reponer las fibras musculares que se rompieron. Ahora podés tomar la segunda parte de tu desayuno y consumir una infusión con leche con un pedazo de queso o unos huevos revueltos. Si los requerimientos son altos porque tus entrenamientos son muy intensos, sabé que una lata de atún tiene 20 gramos de proteínas, la misma cantidad que una medida de cualquier suplemento de proteínas. En este caso, el profesional que consultes tiene que evaluar si podés cubrir los requerimientos proteicos con alimentos (que siempre se priorizan antes de incluir un suplemento).
Si el horario de la actividad es a la tarde, es mucho más fácil. Hacés una merienda bien completa con frutas, tostadas y una infusión con leche. Después, te preparás una buena cena con proteínas y carbohidratos. Ahora sí, a entrenar con todo el power y acordate que, antes de hacer cualquier cambio en tu dieta, tenés que visitar a un profesional.
Experta consultada: Lic. en Nutrición María Laura Romano, Directora de Integral Nutrición.
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