POEMA AL GENERAL JOSE DE SAN MARTIN ... MICAELA ESPINOSA
La espada encendida. Enrique Gamarra Y fue cuando la patria era un sueño tendido en las llanuras. Lo supieron los sauces, en la orilla de un río casi niño todavía. Lo repitieron los caraguataes como un secreto oscuro de la tierra y lejos, bajo un cielo de gaviotas, se hizo mensaje de agua entre las olas. Fue cuando el aire andaba con su infancia de abiertas golondrinas imaginando coplas y banderas. presintiendo tacuaras y alaridos, reverberos de azules clarinadas. Y fue cuando febrero teñía el mundo con su euforia roja. En Yapeyú , campana de la patria. Aquel niño abrevaba en el rocío. Los luceros le dieron su vocación de luz y advenimiento. En las palomas descubrió un destino de horizontes sin limites de sombras y del árbol extrajo su resina de bosque y madrugada. Después España lo miró distante. Como un sobreviviente de la floresta sudamericana hurgaba en su nostalgia de membrana silvestre cerca de un mar extraño y tumultuoso, donde se hundían fechas de muertos calendarios. Al